Erradiquemos el hambre y mejoremos la seguridad alimentaria: empoderemos a la mujer rural

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Mensaje de la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, con motivo del Día Internacional de la Mujer Rural, 15 de octubre de 2011.

Erradiquemos el hambre y mejoremos la seguridad alimentaria: empoderemos a la mujer rural. Dar prioridad a las mujeres no es una elección. Es una necesidad.

El presente Año Internacional de la Mujer Rural nos recuerda las enormes contribuciones que hacen las mujeres rurales al progreso social y económico en la lucha contra la pobreza, el hambre y la desnutrición. Ahora que los países promueven la seguridad alimentaria es el momento, más que nunca, de empoderar a las mujeres rurales.

En algunas partes del mundo, las mujeres representan el 70 por ciento de la mano de obra agrícola y son el 43 por ciento de los trabajadores agrícolas en todo el mundo. Sin embargo, a pesar de su pesada carga de trabajo y de su productividad, las mujeres rurales siguen siendo víctimas de discriminación, lo que no sólo es una falta de justicia sino que entorpece el adelanto en áreas fundamentales. Si las agricultoras tuviesen un acceso equitativo a los recursos y oportunidades, serían los motores de un mayor progreso en materia de poner fin al hambre, incrementar la seguridad alimentaria y mejorar la salud y la educación.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura indica que si las agricultoras tuviesen el mismo acceso a los recursos como las semillas, el crédito y los fertilizantes, los resultados serían considerables. El rendimiento agrícola de las mujeres podría aumentar de un 20 a un 30 por ciento, lo que a su vez aumentaría la producción agrícola en los países en desarrollo hasta en un 4 por ciento. También tendría como resultado que entre 100 millones y 150 millones de personas dejarían de pasar hambre.

Garantizar el acceso de las mujeres a la tierra y a otros recursos requiere hacer cambios en las leyes y las instituciones para terminar con la discriminación, y contar con políticas públicas propicias que promuevan la igualdad. También requiere el compromiso de las organizaciones comunitarias y la participación de las mujeres rurales en la toma de decisiones.

En la reunión del año que viene de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer, el énfasis se pondrá en el empoderamiento de la mujer rural. ONU Mujeres espera ansiosamente conservar e incrementar la colaboración con el sistema de la ONU y con otros socios para eliminar los obstáculos que excluyen a las mujeres rurales, y para promocionar leyes y políticas que promuevan sus derechos, oportunidades y participación.

Con ocasión de este Día Internacional, saludo a las mujeres rurales e insto a la comunidad mundial a reconocer las contribuciones que las mujeres rurales hacen al bienestar colectivo. Es hora de liberar el pleno potencial de las mujeres de modo que generen más progreso para las personas y para el planeta. Dar prioridad a las mujeres no es una elección. Es una necesidad.