Palabras pronunciadas por Michelle Bachelet al recibir el premio Protagonista de las Noticias de la Década de Women’s eNews

Fecha:

La Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, fue galardonada con el premio Protagonista de las Noticias de la Década en el transcurso de la Gala de 21 líderes para el Siglo 21 de Women's eNews, celebrada el 3 de mayo de 2011 en Nueva York.

[Cotejar con el texto pronunciado.]

Es un placer muy especial estar aquí rodeada de tantos líderes excepcionales que han atraído la atención del mundo sobre temas que, de otro modo, pasarían inadvertidos. Ustedes nos inspiran a todos los que tratamos de empoderar a los más vulnerables. En calidad de primera directora de ONU Mujeres, me he comprometido a defender los derechos de las mujeres y de las niñas en todas estas áreas — incluyendo el erradicar la violencia contra las mujeres y las niñas y promover su liderazgo en todas las áreas.

Con la creación de ONU Mujeres, que consolidó a cuatro organismos más pequeños, los Estados Miembros de la ONU reconocieron que el hacer avanzar la igualdad de género significa acelerar los progresos de todos los objetivos de desarrollo, y que tenían que enviar el mensaje de que la igualdad de género y los derechos de las mujeres están al mismo nivel que otros imperativos mundiales como el poner fin a la pobreza y luchar contra el cambio climático.

La Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, recibe el premio Protagonista de las Noticias de la Década de Women's eNews.
La Editora en Jefe de Women's eNews, Rita Henley Jensen, presenta el premio Protagonista de las Noticias de la Década a la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, durante la Gala de los 21 Líderes para el Siglo 21 que fue celebrada en Nueva York el 3 de mayo de 2011. (Foto: Women's eNews.)

Sabemos que, para conseguir el cambio necesario, tendremos que establecer sólidas alianzas, con todos los segmentos del sistema de la ONU y con los gobiernos, la sociedad civil, el sector privado, las fundaciones y los medios de comunicación, de manera de poder apoyarnos en el impulso generado para alcanzar el cambio.

Como dijera cuando entré a la ONU el año pasado: “Las palabras que oímos en las conferencias de la ONU — que la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son objetivos en sí mismos e intrínsecos a todos los demás objetivos — debe ser más que un mantra. Debe ser una realidad vivida en todos los países.

La autonomía económica de las mujeres ya ha atraído la atención de los principales actores, incluyendo la de las corporaciones y los medios de comunicación. El informe sobre la Brecha de Género del Foro Económico Mundial indica que, en 134 países, una mayor igualdad entre los géneros se relaciona de manera positiva con el PIB per cápita. Un estudio de las compañías de la lista Fortune 500 mostró que las que tienen tres o más mujeres en sus juntas ejecutivas tuvieron 53 por ciento mejores resultados que las demás.

Este tipo de noticias hace que los gobiernos presten atención. Sin embargo, la autonomía económica no se trata sólo de utilizar a las mujeres para el crecimiento económico. Las mujeres que ganan sus propios ingresos pueden también cambiar la manera en que se toman las decisiones dentro de la familia y exigir el derecho a vivir libres de violencia.

El empoderamiento económico de las mujeres es, por lo tanto, una prioridad esencial para ONU Mujeres, una prioridad sobre la que aunaremos a todo el sistema de la ONU. Debemos trabajar juntos para apoyar la autonomía económica de las mujeres, darles oportunidades de tener buenos empleos y de generar bienes, y otorgar la protección social a todos los trabajadores.

Otra prioridad es la participación política, que es un requisito previo esencial para el empoderamiento de las mujeres y para una verdadera democracia. Las mujeres están ansiosas de asumir ese rol. En todos los países árabes, las mujeres que hasta ahora no formaban parte de la escena política, hoy exigen el derecho de participar en la revitalización de sus sociedades, incluso de presentarse a las elecciones y de participar en los procesos de reforma constitucional.

Entre las principales prioridades de ONU Mujeres está la erradicación de la violencia contra las mujeres y las niñas, que es endémica en todos los países. Los países comienzan a darse cuenta de su costo. En los Estados Unidos, por ejemplo, dichos costos representan alrededor de US$ 5,8 mil millones por año en servicios extraordinarios en materia de salud física y mental y de pérdida de productividad, y en Canadá, que tiene menos habitantes y costos inferiores de salud, el total alcanza aún los US$ 1,16 mil millones.

Los costos para las mujeres van mucho más allá que estas estimaciones, especialmente en las situaciones de conflicto. El desdibujar la línea que separa el campo de batalla y la familia en muchos de los conflictos actuales implica que los civiles son cada vez más el blanco y las víctimas de la violencia y el abuso sexual.

Aquí también hay un impulso para el cambio. La violación ahora se reconoce y se castiga como crimen de guerra o como crimen contra la humanidad, dependiendo de las circunstancias específicas.

Sin embargo, es necesario que todos demos mucho más.

Para alcanzar los resultados que hoy sabemos son posibles, ONU Mujeres necesita fortalecer sus propias capacidades y las de sus socios, incluyendo a los grupos de derechos de las mujeres, porque el cambio se opera más rápidamente cuando una amplia gama de fuerzas trabajan juntas para alcanzar un mismo objetivo.

Juntos tenemos que encontrar modos de aunar nuestras energías, conocimientos y riqueza generadas en países como éste, y canalizarlos hacia aquéllos que todavía están marginados, de modo de que podamos usar el logro de los derechos de las mujeres y de la igualdad entre los géneros como el principal estandarte de la década.

Muchas gracias.