Entrevista con Lara Fergus, experta en formulación de políticas y facilitadora de la reunión

Fecha:

Foto : Jane Sweeney

Expertas y expertos en prevención de la violencia contra las mujeres y las niñas se reúnen esta semana en Bangkok para examinar prácticas alentadoras de prevención y presentar sus recomendaciones a la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por sus siglas en inglés).

La Comisión es el principal órgano global para la formulación de políticas de igualdad de género y el adelanto de las mujeres. En su próxima sesión en marzo de 2013, los Estados Miembros de la ONU compartirán experiencias y adoptarán resoluciones tendientes a eliminar y prevenir todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas.

La Reunión del Grupo Experto en Bangkok presentará recomendaciones a la CSW para su consideración. Lara Fergus, consultora independiente experta en formulación de políticas de prevención, encabezará los debates en la Reunión del Grupo Experto. La Sra. Fergus conversó con ONU Mujeres acerca de la importancia de invertir en prevención para erradicar la violencia.

Cuando hablamos de prevención de la violencia contra las mujeres y las niñas, ¿de qué estamos hablando específicamente?

La prevención consiste en identificar y afrontar las causas que subyacen al problema, más que enfocarse únicamente en sus resultados y efectos. De manera que, en lo que respecta a violencia contra las mujeres y las niñas, prevenir significa observar cuestiones como actitudes, conductas, prácticas y las ‘normas sociales' que se ha demostrado contribuyen a la violencia, y elaborar estrategias para cambiarlas.

No es tan fácil como parece, pues son muchos los factores que contribuyen al problema y se dan en distintos niveles de la sociedad; por ejemplo, actitudes individuales, expectativas de la comunidad y, lo que es muy importante, la discriminación o las desigualdades más amplias de género. Pero así como los Gobiernos han empleado estrategias sostenidas y multifacéticas para reducir otras conductas complejas y perjudiciales como el tabaquismo y el manejo bajo la influencia del alcohol, también es posible prevenir la violencia contra las mujeres y las niñas.

¿Por qué la prevención es un aspecto tan importante en la respuesta a la violencia contra las mujeres y las niñas?

Si bien es de extrema importancia continuar invirtiendo en respuestas eficaces a las formas actuales de violencia contra mujeres y niñas, como por ejemplo, mediante la mejora de los sistemas de servicios, policía y justicia, ahora sabemos que si solamente nos enfocamos en la respuesta, nunca podremos reducir la cantidad de nuevos sucesos de violencia.

La prevención no sólo es posible, es también fundamental. Además de ser una obligación de derechos humanos de los estados, la violencia contra las mujeres y las niñas produce enormes costos sociales, económicos y de salud, agota los presupuestos públicos, y es solamente mediante el abordaje de sus causas de fondo que será posible reducir esos costos.

La prevención tiene además el potencial de crear numerosos beneficios para las comunidades que van más allá de la disminución de la violencia, ya que aborda discriminación, desigualdad y otras prácticas y conductas que contribuyen a una variedad de males sociales. La prevención tiene que ver en última instancia con crear relaciones, comunidades y organizaciones que sean igualitarias, no violentas y respetuosas de todos los individuos, donde mujeres y niñas vivan libres de la discriminación, el acoso o la violencia que pueden impedirles alcanzar todo su potencial humano.

¿Cuál es la situación actual en el ámbito de la prevención?

En los últimos años, hemos observado un crecimiento en las investigaciones, evaluaciones y actividades de programación primordiales en materia de prevención, y un constante aumento en las pruebas y prácticas que obtienen los mejores resultados, al menos en el orden de la intervención. También observamos un incremento en los llamados que realizan los foros intergubernamentales para implementar enfoques de prevención más integrales, coordinados y sostenidos, basados en las obligaciones en materia de derechos humanos asumidas en tratados como la CEDAW, la Convención sobre los Derechos del Niño y la Plataforma de Acción de Beijing.

Sin embargo, el trabajo actual en prevención, tanto en ámbitos globales como nacionales, en gran medida sigue siendo poco sistemático y de carácter especial. Mucho del trabajo está impulsado por las organizaciones de la sociedad civil, particularmente por las que trabajan con mujeres y niñas, en general con escasos recursos y alcance, lo que dificulta la sostenibilidad y expansión.

Pese a que se ha realizado importantes proyectos de investigación, salvo por una o dos excepciones, estos habitualmente carecen de apoyo para programación o formulación de políticas. Son pocos los gobiernos en todo el mundo que invierten en estrategias de prevención integrales, intersectoriales, sostenidas y generalizadas que no sólo son una obligación emanada de los tratados de derechos humanos, sino que además son fundamentales para la eficacia de las actividades de prevención en el largo plazo.

En su opinión, ¿cuáles son las estrategias eficaces de prevención?

Las estrategias eficaces de prevención son, como expresa la Plataforma de Acción de Beijing, ‘integrales y multidisciplinarias'. Puesto que los factores que contribuyen a la violencia contra las mujeres y las niñas se dan en distintos niveles -individual, de relaciones, comunitario, de las organizaciones y social- las intervenciones y los programas deben operar de similar manera en múltiples niveles. Deben además estar destinados a las personas en los distintos escenarios donde interactúan, como la escuela, el lugar de trabajo, los servicios sociales y de salud, clubes deportivos, instituciones confesionales y comunidades locales.

Una única intervención o un único programa no alcanzan para prevenir un problema tan profundamente arraigado como la violencia contra las mujeres y las niñas. Las intervenciones de excepción o de un único sector, una campaña social o un programa escolar, si bien pueden tener cierta eficacia para sus participantes, no logran cambiar las normas sociales al interior de la comunidad o la sociedad y disminuir la prevalencia de la violencia contra las mujeres y las niñas en la sociedad en su conjunto.

Se necesita una serie de intervenciones, desarrolladas e implementadas en coordinación entre distintos ámbitos y contextos, para prevenir eficazmente la violencia contra las mujeres y las niñas. Estas estrategias deben ir apoyadas por una reforma política y legislativa, y un mecanismo institucional que promueva la igualdad de género, afronte la discriminación y ofrezca una respuesta eficaz a la violencia imperante.

¿Qué resultados espera de esta Reunión del Grupo Experto?

Para promover la agenda de prevención a nivel global no sólo necesitamos mayor compromiso e inversión, especialmente de los estados, sino también más coordinación para investigación, políticas y programación, a nivel global, regional y nacional, hacia una agenda compartida. Ésta será una de las primeras reuniones internacionales sobre prevención de la violencia contra mujeres y niñas que congrega a un abanico tan amplio de personas de diferentes disciplinas y tipos de trabajo. Contamos con la presencia de investigadoras/es, formuladoras/es de políticas, expertas/os en programación y profesionales de todas las regiones, y cada una/o de ellas/os aporta experiencia y conocimientos sustanciales acerca de ‘cómo hacer prevención'.

El desafío -y valor- de la Reunión es que todas y todos nos aproximaremos a la temática desde perspectivas levemente distintas. De modo que espero que esta Reunión nos dé el espacio para aprender mutuamente, debatir los temas difíciles, y arribar a acuerdos y recomendaciones en común para el futuro que puedan ser adoptadas por la CSW. Tenemos todos los ingredientes: resultados de investigaciones, aprendizajes prácticos, ejemplos de políticas y un grupo de individuos extraordinarios. Sólo nos resta hacer el pastel.

Enlaces Relacionados