Desde mi perspectiva: Ileana Crudu
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En mi comunidad, la mayoría de las personas piensan que las mujeres no son tan lógicas como los hombres. Esto afecta las elecciones que hacemos en la vida; el mensaje es que algunos trabajos sencillamente no son para nosotras.
El año pasado, antes de graduarme de la escuela secundaria, participé en un campamento de verano de la iniciativa GirlsGoIT. El proyecto nos demostró que la tecnología de la información no es sólo para hombres. Derribó el estereotipo de que las niñas no pueden programar y no son tan buenas como los niños.
Empecé a programar después de ese campamento de verano y llegué a ser embajadora de GirlsGoIT, deseando mostrar a las otras niñas cómo programar. Formé parte de un curso de 5 semanas en el que participaron 40 niñas de mi ciudad, Chișinău.
Estudiar programación ha cambiado la perspectiva de cientos de niñas moldovas de mi generación. No se trata sólo de la tecnología de la información; se trata de creer en nosotras mismas, más allá de los roles de género tradicionales con los que nos dijeron que teníamos que vivir.
Hoy estudio ingeniería del conocimiento en una universidad de los Países Bajos. Después de la experiencia con GirlsGoIT, no tenía dudas de que mi futuro estaba en la tecnología de la información, pero también en este sector las niñas representan una minoría de apenas el 10 por ciento.
El sector de la Tecnología de la Información y las Comunicaciones (TIC) combina la creatividad y la lógica. Con estas herramientas, el mundo no tiene límites: podemos hacer lo que queramos con sólo programar unas cuantas líneas de código.
Si la gente dice que programo como una niña, me siento orgullosa, ¡porque sé que programando puedo revolucionar el mundo!”
En 2016, cuando Ileana Crudu, que ahora tiene 19 años, terminó la escuela secundaria, había completado un año de capacitación como participante de GirlsGoIT, una iniciativa que, con el apoyo de ONU Mujeres, derriba los estereotipos de género en el sector de la Tecnología de la Información y las Comunicaciones (TIC). Ahora, Ileana es una embajadora incansable que alienta a las niñas a estudiar tecnología y sigue promoviendo la participación de las niñas y las mujeres en el sector de la TIC en la universidad de los Países Bajos donde estudia. El trabajo de Ileana contribuye al logro del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5, relacionado con la igualdad de género y la mejora del uso de la tecnología de la información y las comunicaciones para empoderar a las mujeres y las niñas.
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