Declaración ante la Primera Sesión Ordinaria de la Junta Ejecutiva, ONU Mujeres – Punto 2: Introducción de Propuestas Relativas al Uso de Recursos Voluntarios para el Presupuesto de Apoyo de 2011

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Señora Presidenta:

Es un placer para mí presentar hoy a la Junta Ejecutiva las primeras propuestas de ONU Mujeres relativas al uso de recursos voluntarios para respaldar el presupuesto de 2011. Reconozco la importancia de esta oportunidad que se me da de iniciar una discusión con la Junta Ejecutiva, que será continua, sobre cómo crear un organismo ONU Mujeres que sea un agente fuerte, sensible y eficaz que permita hacer avanzar la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres. Con su guía y apoyo construiremos, sobre los cimientos de las cuatro entidades integrantes, una organización sólida que tendrá las capacidades necesarias para dar a nuestros socios un apoyo oportuno y eficaz. Si bien el desarrollo pleno de nuestra organización requerirá varios presupuestos sucesivos, debemos hoy dar pasos esenciales para expandir su alcance y reforzar sus bases.

El presupuesto de apoyo es importante por dos razones principales: se pretende que sea el vehículo para una financiación sólida y sostenible de la infraestructura y de los recursos humanos básicos que permitan a ONU Mujeres cumplir con su mandato operacional, y también que facilite una gobernanza eficaz por parte de la Junta Ejecutiva. Es gracias a la aprobación del presupuesto de apoyo que la Junta Ejecutiva conseguirá una capacidad sostenible de ONU Mujeres.

El presupuesto de apoyo ha sido preparado para los primeros meses de la existencia de ONU Mujeres, antes de que entrase en operaciones el 1º de enero de 2011. Por lo tanto, no se ha podido beneficiar de la existencia de un Plan Estratégico, que les será sólo presentado en junio de este año, ni de la información completa ofrecida por la evaluación de las capacidades sobre el terreno, que se está llevando a cabo.

También hay que destacar que no se origina en un presupuesto de apoyo sólido desde donde pueda ampliarse. El presupuesto de apoyo heredado por ONU Mujeres no ofrece una base exacta para comprender los requisitos básicos de la nueva organización. Debido a una serie de razones históricas, el presupuesto de apoyo se usó casi exclusivamente para las capacidades de la sede, mientras que casi toda la presencia sobre el terreno se financió con fondos de programas o de proyectos. Como resultado y de manera general, la Junta Ejecutiva no consideraba esa presencia en términos de recursos humanos presentes en los países donde se ejecutaban programas. Además, si bien las contribuciones a UNIFEM se multiplicaron en los últimos cuatro años, la mejora de las capacidades gracias al presupuesto de apoyo quedó a la zaga. Por ende, se han utilizado hasta la fecha una serie de disposiciones ad hoc insostenibles, para dar respuesta a las necesidades operacionales tanto de la sede como del terreno. El presupuesto de apoyo tiene que corregir ahora las deficiencias del pasado y dejar evidentes los requisitos de la presencia de ONU Mujeres sobre el terreno.

Por todo esto, mi propuesta de presupuesto se centra en dos temas principales: primero y lo más urgente es comenzar a mejorar la capacidad de ONU Mujeres de intensificar su trabajo en el ámbito de los países en cumplimiento de su mandato, que indica hacerlo sobre una base universal. Poner el énfasis sobre los países es pues urgente.

El segundo tema es el de remplazar el legado de disposiciones anteriores con un fundamento institucional más sólido, sobre la base de los estándares que se aplican a los organismos de las Naciones Unidas.

En este sentido, tengo tres ideas.

Primeramente, hacer que el presupuesto de apoyo sea un mecanismo más transparente y eficaz, trabajando estrechamente con UNICEF, PNUD y UNFPA para alcanzar metodologías de presupuesto armonizadas de modo de que quede claro qué debe ser incluido bajo el rubro apoyo y cómo relacionar los recursos con los resultados. Las correspondientes Juntas Ejecutivas han tomado recientemente decisiones pertinentes. En el transcurso de esta tarea, consultaremos informalmente con la Junta Ejecutiva, a la cual informaré en el transcurso de nuestra sesión anual de este año de los progresos obtenidos.

En segundo lugar, pasaremos progresivamente a financiar las funciones básicas de apoyo — que hasta ahora se han financiado de los recursos de los programas — con el presupuesto de apoyo. Esto aumentará la transparencia y permitirá a ONU Mujeres atraer y retener al mejor personal profesional existente. Un cambio de fuente de financiación es un rasgo importante de mi propuesta. Dado el rápido crecimiento de la cantidad de funcionarios y de personal bajo contrato en el pasado reciente, trataré de garantizar que los recursos y las disposiciones relativas a la cantidad de personal se usen como es debido según las funciones que se requieran.

Señora Presidenta:

Una de las dificultades con las que me he encontrado en el proceso de preparación del presupuesto de apoyo ha sido la mala racionalización del proceso presupuestario y del de programas en este primer año de las operaciones de ONU Mujeres, ya que se está estudiando el presupuesto ahora mientras que el Plan Estratégico se estudiará en junio. Reconozco que la Junta Ejecutiva preferiría estudiar las propuestas presupuestarias de ONU Mujeres una vez que se disponga del Plan Estratégico completo. Sin embargo, estamos todos de acuerdo en que las expectativas son muchas y que ONU Mujeres debe comenzar inmediatamente a arrojar resultados para las mujeres. El problema ahora es cómo reconciliar la necesidad inmediata que tiene ONU Mujeres de mejorar su apoyo operacional a los países y llevar a cabo una gestión sin tropiezos de la transición, con la necesidad que tiene la Junta Ejecutiva de ofrecer una guía en materia de políticas a través del Plan Estratégico. Inspirándonos en el informe de la Comisión Consultiva en Asuntos Administrativos y de Presupuesto (CCAAP), hemos identificado una serie de medidas inmediatas para ser aprobadas que permitirán a ONU Mujeres dar respuesta a las necesidades urgentes sin perturbar las decisiones de la Junta Ejecutiva sobre el Plan Estratégico. Esas medidas se discuten en la respuesta de la Dirección al informe de la ACABQ, y creo que hoy tienen que estar en el punto de mira del debate sobre el presupuesto.

Al presentar la propuesta corregida, mi principal preocupación es mejorar el apoyo a los países por medio de medidas en los ámbitos regional, subregional y de país. Un paso inmediato a dar es el de aumentar la capacidad de ONU Mujeres en los seis centros de apoyo regional del Grupo de las Naciones Unidas para el Desarrollo (GNUD). ONU Mujeres ya tiene equipos subregionales en Bangkok, Dakar, Johannesburgo y Bratislava, que pensamos reforzar. ONU Mujeres también establecerá una nueva presencia en Panamá y en El Cairo para trabajar conjuntamente con los equipos regionales del PNUD en esos lugares. Estos centros regionales de apoyo nos van a permitir cementar el principio de universalidad, ya que serán fuentes de apoyo para los países desarrollados y de programa en los que ONU Mujeres no tiene actualmente una presencia. Una participación considerable en los centros regionales es un elemento importante de la responsabilidad de ONU Mujeres de liderar, de ofrecer una coordinación eficaz y de velar por una coherencia del trabajo del sistema de las Naciones Unidas en materia de igualdad entre los géneros. Los equipos de ONU Mujeres en los centros regionales se unirán a los equipos regionales de otros organismos de la ONU para ofrecer su experiencia técnica y una calidad segura a la hora de crear y evaluar los marcos de asistencia de las Naciones Unidas para el desarrollo y de otros esfuerzos conjuntos de planificación, de identificar a los expertos técnicos para ayudar a los equipos de las Naciones Unidas en los países en una serie de áreas temáticas, y de establecer iniciativas regionales conjuntas.

Hasta ahora, nuestra programación en los países ha sido seguida por 15 oficinas subregionales. Cuatro de ellas están en lugares donde hay centros regionales. Las oficinas subregionales seguirán siendo importantes aunque sus funciones y perfiles cambien con el tiempo a medida que se fortalezca el apoyo a los países. Por lo tanto, propongo que, en 11 oficinas subregionales, la Junta Ejecutiva acorde financiar su capacidad básica con el presupuesto de apoyo más que con los recursos de programas. Si colocamos esta capacidad en el presupuesto de apoyo, la hacemos transparente a la Junta Ejecutiva y queda sujeta a sus decisiones a través del proceso del presupuesto de apoyo.

Como ya lo he expresado en otras ocasiones, mi principal preocupación es cumplir con las altas expectativas que existen de que ONU Mujeres intensifique y mantenga su compromiso directamente en el ámbito de los países como parte de los equipos de las Naciones Unidas en los países. Entiendo muy bien que las decisiones que tome la Junta Ejecutiva sobre el Plan Estratégico y las conclusiones que saque de la evaluación de capacidades sobre el terreno serán esenciales para decir cómo y dónde establecerá ONU Mujeres su presencia y sus recursos, pero también creo que es fundamental evitar retrasos innecesarios a la hora de mejorar el apoyo a los países. Esta situación muestra el desafío que presenta la mala alineación del ciclo del presupuesto con el de programas. Sin embargo, el problema es también limitado, ya que se refiere a los cinco meses que van desde hoy hasta la sesión de junio. La confianza mutua y un poco de creatividad podrán resolverlo.

Propongo que la Junta Ejecutiva dé su aprobación al presupuesto para la capacidad básica de 15 oficinas de país, que han sido definidas en el pasado como aquéllas que incluyen dos puestos en el país. Este paso implica cambiar las fuentes de financiación de los puestos existentes y no tendrá una implicación financiera neta. Además, se proponen nuevos recursos para equipar a ONU Mujeres para que dé respuesta a requisitos de programas especialmente complejos en hasta dos países. Estos recursos serán liberados a la luz del Plan Estratégico. Sin embargo, en el período entre el día de hoy y entonces, usaré mi discreción para utilizar esa capacidad para dar respuesta a las necesidades urgentes. De darse este caso, por supuesto informaré a la Junta en la sesión de junio.

Si bien, de manera general, las propuestas de recursos se centran en mejorar el apoyo a los países, también les estoy solicitando que aprueben tres puestos para mi equipo superior de gestión, cinco otros puestos que se necesitan urgentemente en la sede, y dos cambios de categoría a D-1. Los detalles de estas propuestas se encuentran en la respuesta de la Dirección al informe de la ACABQ.

Señora Presidenta:

Mis propuestas son prudentes. En lo relativo al personal, propongo 32 nuevos puestos. Se propone además que otros 117 puestos existentes pasen del presupuesto de programas al presupuesto de apoyo. El costo total del presupuesto de apoyo es de 51,5 millones de dólares. A esta suma habrá que agregar los requisitos de la gestión del cambio, de la mudanza de las oficinas y ciertos costos de la Asamblea General.

Señora Presidenta:

Las proposiciones descritas son sólo el comienzo. El equipo de ONU Mujeres y la Junta Ejecutiva tendrá mucho que hacer conjuntamente para establecer el Plan Estratégico, estudiar la evaluación de capacidades sobre el terreno y fortalecer el funcionamiento interno de ONU Mujeres para respaldar nuestros ambiciosos planes. Les presentaré una actualización en junio de los progresos que estamos haciendo en la implementación de este presupuesto, y me reservo el derecho de presentar nuevas propuestas que puedan ser necesarias a la luz del Plan Estratégico y de las necesidades operacionales.

Muchas gracias.