Declaración conjunta de Sima Bahous, Directora Ejecutiva de ONU Mujeres y S. E. Sr. Georges Rebelo Pinto Chikoti, Secretario General de la Organización de los Estados de África, el Caribe y el Pacífico (OEACP) sobre el Día de los Derechos Humanos (10 de d

Hoy conmemoramos el Día de los Derechos Humanos, mientras concluye la campaña ÚNETE de 2021 “Pinta el mundo de naranja:¡Pongamos fin a la violencia contra las mujeres YA! Reafirmamos juntas y juntos, frente a la continua e incluso creciente violencia de género durante la pandemia de COVID-19, y en el contexto mundial de conflictos violentos, que los derechos de las mujeres son derechos humanos. Existen profundas interconexiones entre poner fin a las violaciones flagrantes de esos derechos, ofrecer la oportunidad de vivir sin temor y el derecho a la seguridad, la dignidad, la igualdad y la justicia.

Declaración conjunta de Sima Bahous, Directora Ejecutiva de ONU Mujeres y S. E. Sr. Georges Rebelo Pinto Chikoti, Secretario General de la Organización de los Estados de África, el Caribe y el Pacífico (OEACP) sobre el Día de los Derechos Humanos (10 de d

Los nuevos datos publicados por ONU Mujeres destacan el modo en que la pandemia ha impactado la seguridad de las mujeres en el hogar y en los espacios públicos. El informe abarca a más de 16.000 mujeres encuestadas de 13 países. Sus conclusiones refuerzan nuestra comprensión de las tendencias actuales y subrayan la necesidad de implementar nuestros enfoques más exitosos. 

La situación ha empeorado notablemente en el caso de las mujeres, especialmente las jóvenes, durante la pandemia de COVID-19. El estudio muestra que casi una de cada dos mujeres informó que ella, o una mujer que conoce, sufrieron alguna forma de violencia desde que comenzó la pandemia. El grupo más vulnerable fue el de las mujeres más jóvenes, de 18 a 39 años de edad. Alrededor de una de cada cuatro mujeres se siente menos segura en el hogar, y el conflicto existente aumenta dentro de los hogares desde que comenzó la pandemia. Fuera de sus hogares, las mujeres también informan sentirse más expuestas a la violencia: alrededor de tres de cada cinco mujeres señalan un empeoramiento del acoso sexual en los espacios públicos desde el inicio de la COVID-19.

Lamentablemente, también sabemos que la violencia contra las mujeres, en sus múltiples formas, sigue sin ser denunciada por una variedad de razones, entre las que se cuentan la impunidad, el silenciamiento, el estigma, la vergüenza y el miedo a las represalias. Estas conclusiones, de reiteradas violaciones de los derechos, y la renuencia a atreverse a nombrarlas, son fuertes señales de acción.

La violencia contra las mujeres se puede evitar. Los enfoques exitosos son integrales, e incluyen la prevención; acelerar las reformas de los marcos legales discriminatorios; asegurar que haya servicios esenciales disponibles y sean accesibles para las sobrevivientes, así como impulsar los esfuerzos para enjuiciar a los autores.  La Iniciativa Spotlight de la Unión Europea y las Naciones Unidas han logrado resultados sólidos en 25 países, 18 de los cuales son miembros de la OEACP. Las pruebas recientes de estas exitosas intervenciones en 2020 incluyen un “One Stop Center” (centro de ventanilla única) en el noroeste de Nigeria, que ha proporcionado atención médica, apoyo psicosocial y médico a más de 400 sobrevivientes de violencia de género; apoyo al acceso a la justicia en Malawi con tribunales móviles que pudieron concluir 149 casos; en tanto que en Trinidad y Tobago se fortaleció la vigilancia sensible al género para el enfoque de la investigación general y la gestión de los casos. En Haití, más de 4.000 personas han recibido capacitación en técnicas exitosas de cambio de comportamiento dirigidas a los padres. Las evaluaciones mostraron un aumento del 47,6 % de los padres que estaban de acuerdo en que debían tratar a hijos e hijas con la misma consideración.

En total, en los países asociados a la Iniciativa Spotlight el año pasado, más de 650.000 mujeres y niñas pudieron acceder a servicios de violencia de género, a pesar de las restricciones relacionadas con la pandemia. También vimos un aumento del 22 % en el enjuiciamiento de los autores, y se aprobaron o fortalecieron con 84 leyes y políticas. 

Al mirar con esperanza, también reafirmamos la voluntad de trabajar de manera conjunta. Partiendo de las oportunidades que brinda el Foro Generación Igualdad, apoyamos firmemente la labor de la Coalición para la Acción sobre Violencia de Género, junto con grupos de mujeres, jóvenes, sociedad civil, instituciones religiosas, filantropía, sector privado, organizaciones internacionales y Estados Miembros de las Naciones Unidas.

Con las nuevas oportunidades que surjan, nos aseguraremos de que los derechos de las mujeres, la igualdad de género y el fin de la violencia contra las mujeres estén a la vanguardia de nuestro trabajo con miras al logro de la Agenda 2030 y como base fundamental de la Agenda Común del Secretario General de las Naciones Unidas. 

Es intolerable que en distintos países las mujeres y las niñas sigan luchando por ejercer plenamente sus derechos humanos. Esto tiene que cambiar. Nos corresponde a todas y todos, en conjunto, acelerar el progreso para que las mujeres y las niñas puedan vivir libres de la violencia, en todas partes y siempre.