Impulsar los avances basados en datos para prevenir la violencia y responder a ella en Colombia

En el municipio rural de Pasto, capital del departamento colombiano de Nariño, todas las calles tienen ahora alumbrado; se ha reactivado una unidad de atención integral a las víctimas de la violencia de género; más de 100 mujeres están mejorando su autonomía económica para evitar caer en los ciclos de la violencia; y el presupuesto municipal para cuestiones de género se ha triplicado con respecto a la época previa a la pandemia.

Impulsar los avances basados en datos para prevenir la violencia y responder a ella en Colombia

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Una productora de café colombiana en la región de Nariño, Colombia. Fotografía: ONU Mujeres/Ryan Brown
Una productora de café colombiana en la región de Nariño, Colombia. Fotografía: ONU Mujeres/Ryan Brown

Pero nada de esto es casualidad. Son logros que se apoyan directamente en las estadísticas de género, incluidos datos localizados y desglosados sobre la violencia contra las mujeres (VCM). 

ONU Mujeres realizó en 2021 una evaluación rápida de género sobre la violencia contra las mujeres durante la pandemia de COVID-19. El 63 por ciento de las mujeres que respondieron a esa encuesta dijo que ellas mismas u otras mujeres que conocen habían experimentado alguna forma de VCM, una cifra que casi dobla el 33 por ciento estimado en una encuesta sanitaria y demográfica nacional de 2016. Además, esta evaluación rápida desveló que el 20 por ciento de las mujeres cree que los conflictos domésticos aumentaron durante la pandemia, el 36 por ciento piensa que es común que las mujeres sean acosadas en público y el 43 por ciento afirma que el abuso doméstico se ha vuelto más frecuente como resultado de la pandemia. 

Estos y otros datos de la evaluación rápida se presentaron en noviembre de 2021 mediante una serie de actividades en las que participó Isabel Goyes, codirectora del Observatorio de Género de Nariño. 

"Claramente, estos informes aportaron parámetros de referencia muy importantes. En la reunión de Bogotá comentamos que esas cifras eran muy útiles, pero que necesitábamos datos desglosados para las regiones", explica Goyes. "Le otorgamos un contexto regional a las cifras nacionales y, después de aquella reunión, nos dieron acceso a los microdatos desglosados, lo que nos facilitó información específica de Nariño y nos permitió elaborar un análisis". 

El Observatorio preparó el informe Cifras Violeta enfocado en el departamento de Nariño y el municipio de Pasto, cuyos resultados se divulgaron a través de programas de radio y televisión, en una presentación y mediante difusión directa a las instituciones, autoridades y entidades pertinentes. 

Elena Pantoja, responsable de la Secretaría de las Mujeres, Orientaciones Sexuales e Identidades de Género de la Alcaldía de Pasto, fue una de las destinatarias: "Gracias a estas cifras, conseguimos que nuestra Alcaldía entendiera la importancia del asunto e incluyera varios aspectos en el Plan de Desarrollo Municipal para obtener recursos no asignados. Esto nos permitió acceder a más fondos que nunca y desarrollar un proyecto de autonomía económica con una auténtica perspectiva de género, ya que comprendimos que, con esos niveles de violencia en los hogares, es necesario apoyar la autonomía económica para que las mujeres puedan escapar de los ciclos de la violencia". 

Según Pantoja, en el marco de este proyecto de 2022, 147 mujeres ya se han beneficiado directamente de iniciativas de emprendimiento individuales y colectivas, mientras que otras 435 personas (de sus familias) se beneficiarán de forma indirecta. Además, el proyecto está consolidando la actividad de entre 10 y 15 organizaciones de la sociedad civil. 

"Con estos datos, le dimos visibilidad a los problemas de nuestro territorio y logramos atraer medios para atender a las víctimas en las comisarías de policía, mediante la cooperación española", relata Pantoja, que añade que el programa incluyó capacitación y asistencia tecnológica para la Policía Metropolitana, de modo que ahora el cuadrante más cercano puede llegar a una mujer que está sufriendo violencia en menos de 3 minutos. "Nos han ayudado a abrir puertas, concienciar y mejorar la coordinación interinstitucional con las entidades que deben garantizar la atención y la protección". 

Pantoja asegura que contar con datos localizados sobre la violencia de género contra las mujeres también ha contribuido a aumentar las asignaciones presupuestarias relacionadas. De hecho, la partida para cuestiones de género del Plan de Desarrollo Municipal se ha triplicado, pasando de 400 millones de pesos colombianos (83.000 USD) el año antes de la pandemia a 1200 millones de pesos (250.000 USD) en 2021. 

"Estos estudios han dado la posibilidad de involucrarse en consejos gubernamentales, secretarías y entidades descentralizadas", apunta Pantoja. "Se han llevado a cabo muchas acciones. Y se valora, porque estos datos están convirtiendo el Mecanismo de Género en algo fundamental. … Estas cifras nos permiten concienciar desde dentro, institucionalmente, de modo que los recursos no se asignan simplemente para cumplir objetivos o indicadores, sino que nos ponemos en la piel de quienes necesitan estas acciones estratégicas". 

Además, el Observatorio ha utilizado la información sobre la violencia contra las mujeres para hacer presión y ha logrado que la Universidad de Nariño reabra la Unidad de Atención a Víctimas de Violencias Basadas en el Género (UNAVI), que cerró durante la pandemia por problemas administrativos. Volvió a funcionar en mayo de 2022 y cada mes ofrece apoyo psicológico y asesoría jurídica a alrededor de 20 sobrevivientes. 

"Las estadísticas han resultado muy útiles, no sólo para la reapertura de la UNAVI, sino también porque han sacado a la luz una serie de agresiones que se producen en el ámbito público y el privado y que las mujeres no denuncian", indica Henry Rosero, fundador y profesor consultor de la UNAVI. 

Rosero cuenta el caso de una sobreviviente de la violencia en el ámbito privado que se vio obligada a huir de su hogar con sus hijas e hijos durante la pandemia y que hace unas semanas pudo volver a casa —que su agresor tuvo que abandonar— gracias al apoyo jurídico de la UNAVI. 

Rolando Crespo, Coordinador del proyecto Las Mujeres Cuentan de ONU Mujeres Colombia, destaca la importancia de los datos sobre la violencia contra las mujeres para hacer realidad los cambios necesarios: "La evidencia puntual tiene la capacidad de impulsar las transformaciones sociales, económicas y políticas que precisamos para lograr la igualdad real entre las mujeres y los hombres".