Incorporación de la perspectiva de género al trabajo de otras agencias de la ONU y colaboración con ONU Mujeres

Fecha:

Declaración de la Sra. Michelle Bachelet, Secretaria General Adjunta y Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, en la Reunión Conjunta de las Juntas Ejecutivas del PNUD/UNFPA, UNICEF, ONU Mujeres y el PMA, 4 de febrero de 2011 - Punto 2: Incorporación de una perspectiva de género a través del trabajo de las agencias y colaboración prevista con ONU Mujeres.

[Cotejar con el texto pronunciado.]

Gracias Señora Presidenta.

Durante los últimos cuatro meses he tenido la oportunidad de consultar con mis colegas del sistema de la ONU, y con muchos y muchas de ustedes, acerca de cómo ONU Mujeres puede establecer prioridades que le aporten un valor agregado a aquellos esfuerzos de la ONU encaminados a brindar apoyo a los países para promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. También he recibido muy buenos comentarios sobre cómo podríamos trabajar mejor de manera conjunta para llevar adelante esos esfuerzos.

Me produjo una enorme satisfacción la respuesta cálida y positiva que recibí de mis contrapartes de la Junta de Directores Ejecutivos: Anthony Lake, Director Ejecutivo de UNICEF; Josette Sheran, Directora Ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos (PMA); y Helen Clark, Administradora de PNUD y Presidenta del Grupo de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDG). Quisiera tener unas palabras especiales de agradecimiento para Helen por el excelente apoyo que PNUD ha prestado en el proceso de transición de ONU Mujeres. Estaré encantada de trabajar en estrecha colaboración con Babatunde Osotimehin, el nuevo Director Ejecutivo de UNFPA y de establecer la misma relación productiva que cultivamos con Thoraya Obaid.

A lo largo de estas discusiones, he recogido mensajes muy concordantes acerca de cómo ONU Mujeres debería conducir su labor. Entre ellos, se destacan tres:

  1. ONU Mujeres debería dar prioridad al apoyo a los países en función de la demanda por ellos expresada, centrarse en algunas áreas temáticas críticas y generar resultados visibles.
  2. Deberíamos trabajar con el sistema de la ONU, no competir con éste. Deberíamos forjar alianzas en el sistema de la ONU y crear más oportunidades para que cada organización de la ONU apoye la igualdad de género desde su área de ventaja comparativa.
  3. Hay una necesidad de apoyo de coordinación sistemático y sostenido y de una mayor rendición de cuentas a lo largo del sistema de la ONU en materia de igualdad de género.

La discusión de hoy es una oportunidad muy bienvenida para intercambiar ideas sobre cómo ONU Mujeres debería desenvolver su rol de coordinación y cómo podemos alinear nuestro trabajo con el sistema de la ONU.

Sra. Presidenta, Excelencias, Distinguidos Colegas:

Mis intenciones para la coordinación, así como para todo el trabajo de ONU Mujeres, están regidas por nuestro mandato instituyente, que declara que ONU Mujeres consolidará los mandatos y funciones de las cuatro entidades que la componen, con “la función adicional de dirigir, coordinar y promover la rendición de cuentas del sistema de las Naciones Unidas respecto de su labor relativa a la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de la mujer.

Quiero ser clara por lo tanto en que al cumplir este mandato, ONU Mujeres no tiene ni la intención ni la capacidad de reemplazar la responsabilidad de cada agencia para cumplir con la igualdad de género. En cambio, apoyaremos lo que cada agencia esté realizando y les asistiremos con las dificultades que hayamos identificado colectivamente. Si ONU Mujeres tiene éxito, veremos muchas más inversiones en apoyo a la igualdad de género por parte de las organizaciones de la ONU, no menos.

También es importante decir que consideramos a la coordinación como un medio, y no como un fin o una meta. La meta consiste en obtener resultados más sostenidos sobre el terreno, al apoyarnos más efectivamente en nuestras fortalezas combinadas para asistir a las contrapartes nacionales.

A este respecto, como expresé ante la Junta Ejecutiva de ONU Mujeres la semana pasada, “detrás de mi visión hay un enfoque estratégico del liderazgo que es fundamental para la forma en la que trabajaremos.

Habrá algunas áreas para las que los países buscarán el liderazgo de ONU Mujeres. Un buen ejemplo es el liderazgo de ONU Mujeres en el trabajo del sistema de la ONU para implementar la campaña del Secretario General ÚNETE para Poner Fin a la Violencia contra las Mujeres a través de los Equipos de Directores Regionales y los Mecanismos de Coordinación Regional. Cooperamos estrechamente con todas las contrapartes de la ONU y a menudo co lideramos acciones con otras organizaciones de la ONU, como con UNFPA, por ejemplo.

Sin embargo, también habrá muchas áreas que afecten la vida de las mujeres donde otras ya están haciendo un excelente trabajo, y con quienes estableceremos alianzas sólidas, prestando atención a aquellos temas relacionados con el género que pudieran estar omitidos. Un ejemplo es nuestra labor con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) para aumentar la atención prestada a las dimensiones de género de la migración; otro ejemplo son nuestras alianzas frecuentes con el PNUD alrededor de las elecciones en algunos países.

Y existirán también otras áreas en las que podemos agregar más valor, al garantizar con nuestro rol de coordinación la coherencia en el trabajo de otras agencias. De hecho, si desempeñamos bien nuestra función coordinadora en el sistema de la ONU, podemos tener un impacto muy importante en la vida de las mujeres, sin necesidad de operar en todas las áreas.

La Visión de ONU Mujeres y su Plan de Acción de 100 Días, que regirá el trabajo de ONU Mujeres mientras desplegamos nuestro primer Plan Estratégico, establece cinco áreas temáticas donde creemos que ONU Mujeres puede agregar valor y ofrecer especialización y liderazgo al sistema de la ONU, a saber: 1) la expansión de la voz, el liderazgo y la participación de las mujeres; 2) la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas; 3) el fortalecimiento de la implementación de la agenda sobre mujeres, paz y seguridad; 4) el aumento del empoderamiento económico de las mujeres; y 5) la transformación de las prioridades de igualdad de género en un elemento central para todos los aspectos de la planificación del desarrollo nacional y local.

La selección de estas cinco áreas refleja aquello que hemos escuchado también como prioridades de parte de muchos de Uds. durante las discusiones de nuestra Junta Ejecutiva la semana anterior. Espero que podamos discutirlas en mayor profundidad con nuestra Junta cuando presente el Plan Estratégico en junio.

Durante los próximos cuatro meses, mientras desarrollemos el Plan Estratégico, nos reuniremos con distintas organizaciones del sistema de la ONU que trabajan en cada una de dichas áreas e iniciaremos un diálogo continuo con aquellas más activas, especialmente con nuestros colegas de los Fondos y Programas. De ese modo podremos establecer alianzas útiles con cada una y podremos apoyarnos mutuamente para maximizar el impacto. Anticipo que estos diálogos de nivel superior y técnico continuarán de forma constante y se verán reflejados en los países trabajando a través del sistema de Coordinadores Residentes y dentro de los Equipos de País.

Sra. Presidenta, Excelencias, Distinguidos Colegas:

Desde que me sumé a ONU Mujeres también escuché varios mensajes referidos a la coordinación del sistema de la ONU. Por un lado, los Estados Miembros me dicen que el trabajo del sistema de la ONU dista de ser coherente en los países, aunque se han logrado avances en los últimos años, especialmente a través del sistema de Coordinadores Residentes. Por el otro lado, el personal de las agencias de la ONU en la sede y en los países me comenta que existen demasiados mecanismos de coordinación y que se destina demasiado tiempo a coordinación, con muy pocos efectos.

El documento de referencia para esta sesión especifica que el sistema de la ONU tiene mucho en que apoyarse y contribuir para aumentar la coordinación y promover la rendición de cuentas. Por ejemplo, las revisiones de la Evaluación Común de País/Marcos de Asistencia de la ONU para el Desarrollo (CCA/UNDAF) efectuadas por el Equipo de Tareas sobre Igualdad de Género del Grupo de la ONU para el Desarrollo (UNDG) en 2006 y 2010 encontraron que la calidad de los CCA/UNDAF ha mejorado a lo largo de los últimos tres años, con un mayor nivel de análisis de género y resultados de programación, y con el uso de indicadores pertinentes y transparentes para medir el progreso. Sin embargo, advirtió que “pocos UNDAF especifican la cantidad de recursos que se asignan para resultados de igualdad de género. Cuando esto se hace, indica un compromiso transparente del UNDAF y posibilita un mejor seguimiento de los recursos para la igualdad de género a través del tiempo.

La propia trayectoria de participación de ONU Mujeres en programaciones conjuntas muestra un incremento constante en el número de programas que cuentan con un enfoque de género fuerte y en el número de iniciativas conjuntas sobre igualdad de género. Sin embargo, no tenemos información suficiente sobre los resultados de dichos esfuerzos. El hecho de que haya habido un crecimiento constante en programación conjunta impone la siguiente pregunta: ¿los programas conjuntos consiguen resultados de mejor manera? Y de ser así, ¿qué factores conducen a esto? En concordancia con nuestro compromiso con los resultados, ONU Mujeres trabajará con las contrapartes en una evaluación de las programaciones conjuntas sobre igualdad de género, la cual estará concluida hacia agosto de 2011.

El documento de referencia también contiene ejemplos de buenos resultados que ya se están generando por medio de acciones de coordinación, incluyendo la programación conjunta. Para citar solamente un ejemplo: en Ruanda, donde el gobierno aborda la violencia de género como un problema de seguridad bajo el mandato de la policía y el ejército nacional, PNUD, UNFPA, UNICEF y ONU Mujeres están apoyando un enfoque multisectorial para combatir este tipo de violencia, con roles bien definidos para los actores de la seguridad en la implementación. El informe de la visita al terreno efectuada por las Juntas Ejecutivas Conjuntas el pasado mes de marzo respaldó los servicios de capacitación regionales sobre violencia de género ofrecidos por la policía como “una iniciativa digna de replicar, particularmente para la cooperación Sur-Sur y, a la fecha, 12 países africanos han acordado llevar esto a cabo.

Otros ejemplos de programas conjuntos en el documento demuestran lo que la coordinación puede lograr cuando agrega valor, no sólo un proceso. La coordinación en sí misma no es suficiente para agregar valor y debemos hacer mucho más obtener valor agregado.

Sra. Presidenta, Excelencias, Distinguidos Colegas:

ONU Mujeres debe trabajar con los mecanismos de coordinación vigentes, pero debemos hacerlos más eficaces. Deberíamos procurar reducir los procesos y mecanismos de coordinación prolongados e ineficaces siempre que sea posible. Continuaré trabajando con mis colegas titulares de agencias para forjar un entendimiento mutuo y para aumentar la claridad acerca de cómo cada uno puede agregar valor y trabajar eficazmente para complementarnos y apoyarnos recíprocamente. Debemos dar el ejemplo que seguirá nuestro personal.

Desempeñaremos nuestra función de coordinación a nivel global dentro de la Junta de Directores Ejecutivos, trabajando con el UNDG, el Comité de Alto Nivel sobre Programas (HLCP) y el Comité de Alto Nivel sobre Gestión (HLCM). Y como miembro de los Equipos de País de la ONU, continuaremos trabajando dentro del sistema de Coordinadores Residentes en los países, bajo el auspicio de los Coordinadores Residentes.

Observaremos atentamente la experiencia de otras entidades de la ONU que desempeñan un rol de coordinación y aprenderemos lo que en su opinión mejor funciona y lo que no. Trabajaremos mediante las herramientas analíticas, de planificación e informes disponibles, mejorándolas donde podamos, pero resistiendo a toda tentación de introducir procesos adicionales. Y también aprenderemos de los programas experimentales de la iniciativa Delivering as One, para encontrar un conjunto de buenas prácticas que podamos modelar en distintas situaciones.

El personal a mi cargo está trabajando con la secretaría del Comité sobre Programas (HLCP) alrededor de la rendición de cuentas y con el UNDG para acordar de qué modo ONU Mujeres debería desempeñar su rol de coordinación de forma que agregue el mayor valor posible a su labor a nivel de país. La Administradora de PNUD y yo en breve enviaremos una carta conjunta a los Coordinadores Residentes y los Equipos de País de la ONU. Allí explicaremos qué observamos del trabajo de ONU Mujeres en los países y aseguraremos al personal del sistema de la ONU que la creación de ONU Mujeres significa que deben hacer aún más por las mujeres y las niñas, no menos.

Sra. Presidenta, Excelencias, Distinguidos Colegas:

Con respecto al mandato de promover la rendición de cuentas con el sistema de la ONU en su trabajo para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, ONU Mujeres no será el “policía de género para el sistema de la ONU. No obstante, existe un papel importante que desempeñar y que consiste en asistir a todas las partes del sistema a rendir cuentas por aquello a lo que se han comprometido a hacer, tanto en el plano mundial como en cada país donde están trabajando. El enfoque actual del UNDG para aumentar la planificación y la elaboración de informes a nivel de país y basadas en resultados ofrece una gran oportunidad en este sentido. ONU Mujeres convertirá a este enfoque en una prioridad para considerar qué podemos hacer en cada país para apoyar a cada miembro del Equipo de País de la ONU a revisar e informar sobre la obtención de los resultados que ha acordado apoyar. Ya hemos probado indicadores de desempeño para los Equipos de País de la ONU que podrían ser concluidos, estandarizados y adoptados por todas las agencias del Grupo.

A nivel global, un esfuerzo similar para introducir los marcadores de género que el PNUD y UNICEF, así como otros miembros del Comité Permanente entre Organismos (IASC) sobre asistencia humanitaria ya están utilizando para supervisar las inversiones relacionadas con el género, podría servir para reforzar y expandir el trabajo a nivel de país para promover la rendición de cuentas en todo el sistema de la ONU. Este año, UNFPA instituirá su propio marcador de género. Esperamos discutir y avanzar en un sistema de seguimiento compartido para la ONU y con el Comité sobre Programas y el Grupo de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

Estoy muy deseosa de trabajar en estrecha colaboración aquí con mis colegas durante los próximos meses para emprender una agenda clara para el rol de coordinación de ONU Mujeres como parte de nuestro Plan Estratégico más amplio.

Gracias.