Las iniciativas de generación de ingresos son la tabla de salvación para muchas mujeres rurales
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En Rusia y Asia Central, ONU Mujeres se ha unido a los gobiernos nacionales y a otros socios no gubernamentales como la Organización Internacional para la Migración y al Banco Mundial en un programa que busca mejorar las condiciones de vida de las familias de los trabajadores migrantes. El programa les ayuda a adquirir destrezas y procurar mejores medios de vida.
Una de las estrategias que emplea el programa consiste en ayudar a las familias migrantes a establecer grupos de auto ayuda. En septiembre de 2011, Tayikistán tenía 178 de estos grupos en los que participaban 1.049 personas. Sus integrantes aprenden tareas comerciales básicas y están sensibilizados sobre cuestiones de género y jurídicas que les ayudarán a proteger sus derechos. Además de Rusia y Tayikistán, el programa también opera enla Repúblicade Kirguistán y Kazajstán.
El grupo Sitora de Tayikistán, fue uno de los que comenzó un pequeño negocio. Sus miembros son personas de todas condiciones (maestras, contadoras, etc.) con un fin en común: buscar formas para generar un ingreso extra.
Durante el verano, producen alimentos en conserva (tomates, fresas, damascos y demás productos de las huertas locales) que aprovechan para vender en el invierno. De ese modo el servicio garantiza una oferta local constante de frutas y verduras.
“Ahora todo está disponible de manera continua y los precios no son muy altos, dice Matluba, la directora del grupo. “Yo vendo en el invierno cuando mi esposo llega de Rusia donde trabaja como empleado migrante, momento en el que según Matluba el ingreso familiar por lo general decae. El dinero percibido con las ventas se comparte entre los miembros del grupo.
Ella y otras mujeres del grupo aseguran que la formación de equipos de auto ayuda como Sitora son una herramienta útil no sólo para la generación de ingresos, sino también para las redes sociales entre familias migrantes.