Verdad, justicia y reparación para las mujeres supervivientes del conflicto armado en Colombia
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Colombia vive un conflicto armado desde hace más de medio siglo. Y como en todo conflicto, el impacto sobre la población civil, y en particular sobre las mujeres, es muy elevado: reclutamientos forzados, esclavitud sexual y doméstica y violaciones. El cuerpo de la mujer puede convertirse en objetivo militar, expuesto a diversas formas de violencia física, psicológica y sexual.
En el 2011, la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, sancionada en presencia del Secretario General de las Naciones Unidas, incorporó avances en materia de verdad, justicia y reparación de las víctimas. ONU Mujeres puso todos sus esfuerzos en que la Ley incorporara una perspectiva de género y facilitó la participación de las organizaciones de mujeres en la discusión de la norma que beneficiará a cerca de cuatro millones de personas, una gran parte de ellas mujeres.
La Ley incluye el derecho de las mujeres a vivir libres de violencia y a la atención psicosocial a supervivientes de violencia sexual, así como representación judicial para mujeres supervivientes. La Ley también reconoce privilegios para las mujeres en materia de restitución de tierras.
El reto según la Coordinadora Nacional de ONU Mujeres en Colombia, Margarita Bueso, es conseguir que la Ley se cumpla. “Deben superarse las barreras de acceso a la justicia en relación con la violencia sexual en el marco del conflicto armado, el juzgamiento de los responsables, la imposición de penas adecuadas, el esclarecimiento de la verdad de lo sucedido y la reparación de las víctimas informó.
ONU Mujeres firmó en julio de 2012 un Memorándum de Entendimiento con la Unidad de Atención y Reparación Integral a las Víctimas, el organismo clave del Gobierno de Colombia para la ejecución de la Ley.
El acuerdo garantizará la inclusión de un enfoque de género en los procesos de registro, asistencia, atención y reparación a las mujeres supervivientes del conflicto. ONU Mujeres capacitará a funcionarios de la Unidad en Atención y Reparación, con un énfasis especial en violencia sexual y de género.
Según Paula Gaviria, directora de la Unidad, para solicitar una compensación “la persona debe presentar una declaración sobre los hechos ocurridos ante la defensoría del pueblo de su municipio. Una vez valorada la declaración, se evalúa si la persona entra a formar parte del Registro Único de Víctimas para comenzar a recibir las compensaciones como víctima.
La Unidad de Atención y Reparación Integral a las Víctimas es la primera de cuatro Unidades que el Gobierno de Colombia pone a disposición de los supervivientes de la guerra- junto con la Unidad de Protección, de Restitución de Tierras y el Centro de Memoria Histórica de las Víctimas del Conflicto Armado.