Este es el rostro del liderazgo: Presentamos a Mzuri Issa, o cómo derribar obstáculos sociales que impiden el liderazgo de las mujeres en Tanzanía a través de los medios de comunicación
Con su trabajo en la Asociación de Mujeres de los Medios de Comunicación de Tanzanía en Zanzíbar, Mzuri Issa está al frente de la lucha por conseguir reformas legales y cambios en las políticas y actitudes que impiden el acceso de las mujeres al liderazgo y la toma de decisiones. Las dificultades que atravesó en su infancia la motivan a defender los derechos de las mujeres y las niñas utilizando los medios de comunicación.Fecha:
“Cuando era niña encontré mucho rechazo”, explica Mzuri Issa, directora de la Asociación de Mujeres de los Medios de Comunicación de Tanzanía, en Zanzíbar (TAMWA-Zanzíbar). “Mi madre no tenía los medios para criarme, y pasé la mayor parte de mi infancia trasladándome de un hogar a otro”.
Los hechos
- Las normas sociales y las barreras culturales y de actitud refuerzan la percepción de que los hombres son mejores líderes que las mujeres. El 36% de las personas encuestadas en todo el mundo entre 2017 y 2020 todavía consideraba que los hombres son mejores políticos que las mujeres.
- Las cuotas de género aumentan la representación de las mujeres en las legislaturas y otros sectores cuando están bien diseñadas y se implementan eficazmente. El cambio requiere el apoyo público y la voluntad política de los hombres dirigentes para promover públicamente la igualdad de género y la participación de las mujeres en las esferas de la vida pública.
- Los medios de comunicación, la publicidad, el cine y la televisión pueden ayudar a revertir la discriminación mediante la forma en que se representa a las mujeres líderes. Asimismo, los gobiernos deben financiar y apoyar campañas de información pública con imágenes y mensajes positivos sobre las mujeres para cambiar los estereotipos.
- A escala mundial, las minorías étnicas, las mujeres migrantes, las mujeres de las zonas rurales, las mujeres con discapacidad y las mujeres indígenas siguen haciendo frente a la discriminación y la exclusión de la vida pública. La violencia contra las mujeres en la vida política y pública sigue restringiendo el acceso de la mujer al poder y a la toma de decisiones. Es necesario hacer un mayor esfuerzo para garantizar que todas las instituciones públicas apliquen tolerancia cero a la violencia, la discriminación y los abusos.
“Me hice adulta muy rápidamente. A la edad de 11 años ya trabajaba en un puesto de comida rápida para poder subsistir todos los días. He sido testigo de innumerables formas de discriminación y abusos contra las mujeres, incluida mi propia madre”, añade.
Issa afirma que las dificultades de sus primeros años la motivaron a finalizar su educación y a fundar la sucursal de TAMWA en Zanzíbar en 2004.
Issa acababa de comenzar su carrera como periodista a principios de la década de los 90 cuando se enteró de que existía una ley que discriminaba a mujeres y niñas que se quedaban embarazadas fuera del matrimonio. La pena podía comportar una sentencia de prisión para la mujer embarazada. Issa ha denunciado esta injusticia durante años, además de trabajar junto con socios de los medios de comunicación y activistas solicitando la modificación de dicha ley. Finalmente, esto ocurrió en 2005.
Hacer frente a normas discriminatorias y cambiar mentalidades
Con la financiación y el apoyo técnico de ONU Mujeres, TAMWA-Zanzíbar ha colaborado con líderes religiosos y comunidades de base desde 2010 para transformar las normas culturales, actitudes y prácticas que crean obstáculos para el empoderamiento de las mujeres, lo que incluye su acceso a puestos de liderazgo y toma de decisiones. Por ejemplo, las mujeres de Zanzíbar tienen más probabilidades de estar desempleadas y de obtener ingresos más bajos, y no pueden tomar decisiones en sus hogares o comunidades, ni acceder a cargos políticos debido a los sistemas de creencias patriarcales que dan por sentado que los hombres desempeñan las funciones de toma de decisiones.
“Muchas personas todavía creen que las mujeres no pueden y no deben ser líderes, sobre todo en la política, y basan estas creencias en la religión. Pero el liderazgo de las mujeres es evidente tanto en el Corán como en la Biblia”, afirma Issa.
Issa también destaca en su lucha por reformas legales que garanticen que las mujeres compitan eficazmente por cargos de liderazgo en pie de igualdad con los hombres, y que se pueda exigir responsabilidades a los agresores que ejercen violencia contra las mujeres. Asimismo, promueve específicamente el aumento de las penas de prisión por violación a 30 años.
“Como activista, quiero cambiar las percepciones que causan la discriminación de las mujeres y elevar la situación de las mujeres en la sociedad”, afirma. “Mi trabajo me llena muchísimo”.
En 2020, la organización trabajó con un equipo de 46 hombres agentes del cambio y más de 70 líderes religiosos para promover el liderazgo de las mujeres mediante la concienciación de la opinión pública. La iniciativa llegó a unos 590 miembros de la comunidad en ocho distritos de las islas Unguja y Pemba de Zanzíbar.
TAMWA también colabora estrechamente con los medios de comunicación tradicionales, concienciándolos para que generen información con perspectiva de género y garanticen que las mujeres sean fuentes de noticias importantes, estén representadas adecuadamente en diversos papeles y produzcan contenido conjuntamente, en lugar de ser retratadas únicamente como víctimas. En 2020, TAMWA capacitó a más de 50 periodistas y les asesoró a largo plazo para asegurar que elaboraran contenidos para promocionar el liderazgo de las mujeres. Como resultado, más de 263 noticias y reportajes promovían el liderazgo de las mujeres y la participación significativa en la toma de decisiones en el período previo a las elecciones generales de octubre del año pasado y en el período inmediatamente posterior.
“Como activista, quiero cambiar las percepciones que causan la discriminación de las mujeres y elevar la situación de las mujeres en la sociedad”
Gracias al trabajo de TAMWA-Zanzíbar, Issa cree que ha aumentado la visibilidad de las mujeres en funciones de liderazgo, inspirando así a las mujeres a presentarse a las elecciones. “Un total de 162 mujeres fueron nominadas dentro de sus partidos y se postularon para la elección a la Cámara de Representantes de Zanzíbar y en los ayuntamientos”, afirma Issa. “De las 435 mujeres que expresaron interés en presentarse a diversos niveles, cinco mujeres se postularon para la presidencia, todo un hito en Zanzíbar”.
Actualmente, las mujeres constituyen el 40,8% de la Cámara de Representantes, un aumento del 3% con respecto al anterior quinquenio, y casi el doble de la proporción media de mujeres en parlamentos de África Subsahariana (el 24,4%).
Para lograr un progreso incluso mayor, Issa afirma que es fundamental aumentar el número de mujeres que trabajan en los medios de comunicación. “Como los medios de comunicación sirven de espejo de la sociedad, necesitamos más mujeres que trabajen en ellos para representar con precisión las experiencias de las mujeres”.
“Una mejor representación ayudará a poner fin a los estereotipos negativos que persisten y dará a las mujeres la voz y la plataforma que merecen”.
Un programa a favor del progreso, “Wanawake Wanaweza” (Las mujeres pueden)
La divulgación en la comunidad y el activismo de los medios de comunicación de TAMWA-Zanzíbar se enmarca en el programa de liderazgo y participación política de las mujeres “Wanawake Wanaweza” (Las mujeres pueden), financiado por los gobiernos de Finlandia, Suecia, Suiza y los Estados Unidos.
Desde 2014, el programa ha trabajado para combatir los retos que afrontan las mujeres en el acceso a los puestos de liderazgo y toma de decisiones en toda Tanzanía, identificando las brechas en los marcos legales y de políticas, fomentando la capacidad de las mujeres líderes existentes y aspirantes, y apoyando el cambio institucional para crear un entorno propicio en el que las mujeres puedan asumir puestos de toma de decisiones.
Este año, ONU Mujeres tiene previsto continuar trabajando con TAMWA-Zanzíbar para ampliar su alcance a otros distritos, y centrarse en involucrar a hombres aliados y desarrollar habilidades de liderazgo en mujeres jóvenes, incluidas aquellas con discapacidad.