Desatar las oportunidades

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Las transformaciones en el mundo laboral conllevan otros cambios en términos de retos y oportunidades para las mujeres. Los ámbitos emergentes, como la economía verde o los servicios de asistencia, la mitigación del cambio climático y los avances tecnológicos, brindan a las mujeres nuevas oportunidades de conseguir un empleo decente. Las energías sostenibles y la agricultura que se adapta al cambio climático son una gran oportunidad para las pequeñas y medianas empresas de crear empleos para las mujeres, quienes apenas representan entre el 20 y el 25 por ciento de la mano de obra del sector de las energías renovables modernas [1]. Las disparidades de género que existen en el acceso a la formación digital, los recursos económicos y la toma de decisiones, sumadas a otras dificultades, provocan que las mujeres sean excluidas de las industrias de mayor crecimiento. La brecha de género en el uso de Internet se sitúa, a nivel mundial, en un 12 por ciento. En los países menos desarrollados, esta brecha alcanza el 31 por ciento [2].Pero cuando las mujeres tienen igualdad de oportunidades, pueden realizar contribuciones sustanciales para la sociedad y la economía. Por ejemplo, si se multiplicara por dos el ritmo al que las mujeres adquieren habilidades informáticas, podríamos alcanzar la igualdad de género mucho más rápidamente de lo que auguran las predicciones actuales [3]. Si las mujeres tuvieran la misma presencia en el mercado laboral que los hombres, se podrían sumar al PIB mundial hasta 28 trillones de dólares americanos, o un 26 por ciento, de aquí a 2025 [4].

Desde mi perspectiva: “Cuando me pican, me recuerdan de lo fuerte que soy”

Foto: ONU Mujeres/Rosendo Quintos

Oralia Ruano Lima fue una de las primeras mujeres que se unió a un emprendimiento de apicultura en su comunidad indígena. Hoy las mujeres apicultoras de Urlanta, una aldea en la región suroeste de Guatemala, ofrecen trabajos sostenibles e ingresos a sus comunidades rurales, y desafían los prejuicios y actitudes que afectan a las mujeres de su país. Lea más »

Las mujeres rurales luchan contra el cambio climático

Preservar y plantar semillas tradicionales puede ayudar a mitigar los efectos del cambio climático. ONU Mujeres apoya a las agricultoras en Marruecos a través de un programa conjunto con la ONG local “Terre et Humanisme”. En febrero de 2016, las mujeres lanzaron la “Caravana de semillas”, que anima a las mujeres a compartir sus semillas y su conocimiento y a concienciar sobre el impacto del cambio climático.

Otras voces:

Agricultoras de Nepal se hacen cargo de su vida y sus medios de vida

Gracias a un programa conjunto de ONU Mujeres y sus socios en Nepal, no sólo han mejorado la producción agrícola y los ingresos de las agricultoras, sino que también han cambiado las actitudes discriminatorias basadas en el género de sus homólogos masculinos.Lea más »

Desde mi perspectiva: “Me convertí en la primera pescadora de mi comunidad”

Yayi Bayam Diouf se convirtió en la primera mujer pescadora de su pequeña aldea pesquera en Senegal. Tras allanar el camino a otras mujeres, ahora dirige un centro de capacitación para mujeres, donde éstas pueden desarrollar competencias empresariales y obtener apoyo.

“Vengo de una comunidad pesquera tradicional, en Thiaroye-sur-Mer. Aquí, los hombres son los únicos que entran en el mar y que toman las decisiones importantes. Decían que no podía pescar porque soy mujer y que los peces no picarían el anzuelo de una mujer que tiene la menstruación...”Lea más »

Las economías que benefician a las mujeres benefician a toda la sociedad

El futuro que imaginamos para la humanidad y el planeta que compartimos, recogido en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, depende de nuestra capacidad para aprovechar plenamente el poder y el potencial de las mujeres. Ver el fotorreportaje»