ODS 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos
Metas
- Promover mecanismos para aumentar la capacidad de planificación y gestión eficaces en relación con el cambio climático en los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo, centrándose en particular en las mujeres, los jóvenes y las comunidades locales y marginadas.
- Fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países.
- Incorporar medidas relativas al cambio climático en las políticas, estrategias y planes nacionales.
- Mejorar la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional en relación con la mitigación del cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana.
- Poner en práctica el compromiso contraído por los países desarrollados que son parte en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático con el objetivo de movilizar conjuntamente 100.000 millones de dólares anuales para el año 2020, procedentes de todas las fuentes, a fin de atender a las necesidades de los países en desarrollo, en el contexto de una labor significativa de mitigación y de una aplicación transparente, y poner en pleno funcionamiento el Fondo Verde para el Clima capitalizándolo lo antes posible.
Nota: Esta meta reconoce que la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) es el principal foro internacional e intergubernamental para negociar la respuesta mundial ante el cambio climático.
El cambio climático, inducido por la actividad humana, constituye un riesgo cada vez mayor para las personas y el medio ambiente. Debido al aumento de las temperaturas, las tormentas y las sequías son cada vez más graves. Las tormentas catastróficas destruyen vidas y hogares. El aumento del nivel del mar amenaza las zonas de baja altitud. Las mujeres y las niñas y niños son los más vulnerables, ya que sus probabilidades de morir durante una catástrofe son 14 veces más altas que las de los hombres.
Una de cada cuatro mujeres de la población mundial económicamente activa se dedica a la agricultura, por lo que les toca cargar con las consecuencias climáticas, como las malas cosechas. Suelen tener menos recursos —sistemas de riego, tecnologías, etc.— para afrontar esta situación. De aquí a 2050, la producción de trigo podría reducirse un 49 por ciento en Asia Meridional y un 36 por ciento en África Subsahariana. La disminución de los rendimientos podría suponer una merma en los ingresos y una escasez de alimentos, con el riesgo que implica para las mujeres y niñas de ser las primeras en verse privadas de alimentos. Otras de las presiones a las que se enfrentan tienen que ver con que son responsables, en mayor medida que los hombres, de recoger agua y combustible, los cuales son cada vez más escasos.
Con sus experiencias y los conocimientos tradicionales como administradoras de muchos recursos naturales, las mujeres pueden ofrecer aportaciones valiosas para gestionar mejor los escasos recursos y mitigar los riesgos climáticos. Asimismo, tienen el derecho a contar con todas las capacidades necesarias para adaptarse a los cambios climáticos, y a participar en las decisiones que tienen profundas implicaciones para las personas y el planeta.
ONU Mujeres actúa para combatir el cambio climático fomentando la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en todos los ámbitos, incluidos los foros mundiales sobre el clima, a fin de mitigar el cambio y adaptarse a este. A fin de disminuir el número de mujeres afectadas por los desastres, promovemos la planificación y la capacitación relacionadas con la reducción del riesgo de desastres para ayudar a las mujeres a ser más resilientes y a estar mejor informadas.
Historias
Desde mi perspectiva: No dejar a nadie detrás en Barbuda
Después que el huracán Irma provocó la evacuación de toda la isla de Barbuda, Farmala Jacobs, Directora Ejecutiva Interina de la Dirección de Asuntos de Género de Antigua y Barbuda, habla sobre la importancia de comprender el modo en que el desastre climático afectó a las mujeres, y de incluirlas en la planificación de la respuesta.
Opinión experta: En la creación de resiliencia al cambio climático, las necesidades de las mujeres no se pueden dejar para después
Dilruba Haider, especialista de programa sobre la Reducción del Riesgo de Desastres, Cambio Climático y Acciones Humanitarias de la oficina de ONU Mujeres en Bangladesh, resalta la importancia de incorporar las necesidades prácticas los conocimientos y las capacidades de las mujeres en la planificación, ejecución y medición del éxito de la acción climática.
Ensayo fotográfico: El cambio climático es un problema de las mujeres
Las emisiones de gases de efecto invernadero debidas a la actividad humana, la sobreexplotación de los recursos naturales del planeta y los patrones de producción y consumo insostenibles representan un riesgo para toda la humanidad. Las mujeres son agentes de cambio que igualmente deben ser parte de la solución con miras a un futuro sostenible.