Desde mi perspectiva: “Me obligaron a embarazarme”
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Aung Ja tenía 18 años cuando una mujer de Myitkina, del norte de Myanmar, la convenció de aceptar un trabajo de “fábrica” en China. Fue rescatada en 2017 y está participando en un programa apoyado por ONU Mujeres sobre la prevención de la trata de personas.
La mujer convenció a mi tía que yo podría obtener un trabajo en China. Me enseñó una foto de una fábrica. Fui porque necesitaba un trabajo, pero cuando llegué a China en mayo de 2017, no era lo que parecía.
Me obligaron a embarazarme. Me dieron pastillas por 10 días para preparar el vientre, me llevaron a un hospital para una revisión médica y ahí me inyectaron esperma, en total, tres veces.
Si el embarazo fallaba un cierto número de veces, entonces te liberaban, pero sólo si pagabas el precio. Los líderes de la aldea, la policía y Htoi aconsejaron a mi tía de pagar el dinero para recuperarme.
Cuando regresé, me sentí avergonzada porque todo mundo sabía que había sido víctima de trata. Sin embargo, luego de recibir apoyo legal y capacitación para aumentar conciencia contra la trata de parte de Htoi, finalmente me sentí mejor.