En el Día Internacional de información sobre el peligro de las minas, la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres presta su pierna

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En el Día Internacional de información sobre el peligro de las minas, la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, participó en la iniciativa “Presta tu pierna destinada a sensibilizar a los líderes y demás personas del mundo a unirse a la campaña del Servicio de las Naciones Unidas de Actividades relativas a las Minas (UNMAS) que tiene como fin prevenir que estas armas mortales causen daños indiscriminados a los civiles. En los conflictos contemporáneos, hasta un 90 por ciento de los muertos son civiles, en su gran mayoría mujeres y niños.

UNMAS da asistencia para el cuidado, la rehabilitación y la reintegración socioeconómica de las víctimas de las minas. Las minas terrestres y las municiones sin detonar de las guerras afectan a más de 70 países en el mundo. Ha habido considerables progresos en este sentido lo que ha hecho disminuir la primera cifra estimada de más de 20.000 muertes anuales a 5.200 declaradas en 2008. Sin embargo, las minas y los explosivos siguen siendo una amenaza importante para las vidas, el bienestar y el desarrollo socioeconómico de las personas y de las comunidades en más de 40 países.

El impacto de las guerras es a menudo más severo sobre las mujeres. Las muertes de mujeres debidas a las municiones, las violaciones en masa y los desplazamientos son comunes en las guerras. Las mujeres sufren también por el colapso de las infraestructuras mientras tratan de mantener a sus familias unidas y velar por los miembros heridos de sus comunidades.

Los estudios llevados a cabo por ONU Mujeres muestran que, desde 1992, menos del 10 por ciento de los negociadores de paz han sido mujeres, y menos del 6 por ciento de los presupuestos de reconstrucción atienden específicamente las necesidades de las mujeres y de las niñas. Sin embargo, después de una guerra son las mujeres las que vuelven a agrupar a las familias y las comunidades, aunque sus roles y sus derechos sigan sin ser tenidos en consideración en las conversaciones de paz y en la consolidación de la paz.

Una de las principales prioridades de ONU Mujeres es la de aumentar el liderazgo y la participación de las mujeres en la paz, la seguridad y la respuesta humanitaria. Algunos de los esfuerzos incluyen dar apoyo a las activistas en los países en conflicto y en posconflicto para que estén presentes en las instancias donde se toman las decisiones sobre la consolidación de la paz y sobre su futuro.

En 2010, el sistema de la ONU adoptó un Plan de acción de siete puntos para la consolidación de la paz con una perspectiva de género, que garantiza la participación de las mujeres en los procesos de paz y en la gobernanza posconflicto, incluyendo a través del uso de medidas especiales como la acción afirmativa, el tratamiento preferencial y los sistemas de cuotas, así como la participación equitativa de las mujeres en los programas de desarme, desmovilización y reintegración.

En el año 2000, la adopción de la resolución 1325 del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la mujer, la paz y la seguridad dio un impulso a los esfuerzos por garantizar una perspectiva de género en las situaciones de posconflicto, incluyendo las actividades relativas a las minas, poniendo énfasis en “la necesidad de que todas las partes garanticen que habrá programas de desminado y de concienciación sobre las minas que tomen en cuenta las necesidades especiales de las mujeres y las niñas.

Si desea saber más sobre la campaña “Presta tu pierna, visite el sitio web.